Leyenda urbana.- En la parte rural de Nueva Yok pasaron unos eventos que implican a un inexplicable ser humanoide. Los periódicos locales hablaban de esta criatura, después fue destruida toda la información. Averiguando, se conoce algo de este ser.
Lo describen de un aspecto contrahecho
Los brazos más largos que lo normal, en sus dedos garras largas afiladas, desnudo, atrofiado, tiene posturas de animal. Quienes lo han visto, comentan, que parece que lo atropellaron y le rompieron todos los huesos.
Sus ojos brillan en la oscuridad, se guarda para espiar a los que duermen.
En el 2003 en verano, la criatura estuvo en los medios estadounidenses porque hubo una oleada de muertes. Todos antes de morir dijeron que veían a este ser, los molestaba en sueños y los vigilaba cuando dormían.
El Rastrillo siempre se situaba a los ´pies de la cama y las primeras veces se oculta, sus víctimas tienen la sensación que los espían, sienten la presencia, escuchan los ruidos de sus garras que arañan la madera de la cama esto demuestra al otro día que lo que se oyó fue real.
Empieza a dejarse ver, se siente una sombra andando en la oscuridad
Veras una garra asomando para que lo veas, aquí hay que tenerle temor de verdad, porque después te espera a los pies de tu cama vas a ver sus ojos brillando en la noche. Sus ojos diabólicos nunca se te olvidara, que cada vez cierres tus ojos lo veras y te invadirá el miedo, desaparece, pero te visitara toda las noches.
Se coloca mientras duermes, tan cerca de ti, pegado a tu rostro el espera minutos .o incluso horas mientras el fétido y el sonido de su respiración te despierta. Si eres valiente, abres los ojos y lo ves, él te dirá su nombre “Soy el rastrillo” con una voz chillona después sale del cuarto. La mayoría de las personas se cambian de casa, lo más lejos posible para que el rastrillo nunca los encuentre. Los otros que no lo hicieron murieron de forma misteriosa, reguero de sangre fueron destripados por las garras.
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